Todos sabemos que nuestra vista es atraída por imágenes con telas coloridas, estampados grandes, ropa ceñida al cuerpo, colores alegres, todo super ¨fashion¨ pero ¿Qué hay detrás de todo eso? Si voy a recomendar un look para ir a una entrevista de trabajo o para ir a la oficina debo considerar la psicología del color y el significado subliminal por llamarlo de alguna manera de las telas, texturas y estampados, que muchas personas no conocen pero cuando les explico mediante ejemplos me dicen ¨tienes razón¨.
Hay cosas que sólo sabemos las personas que hemos trabajado o que trabajan como empleados de planilla en corporaciones o instituciones financieras; es decir industrias con un código de vestimenta formal de negocios o elegante casual; ya sea por experiencia propia o ajena, los años que pasamos tras una oficina o escritorio marcan historia en nuestras vidas.
Me refiero a que si trabajo en una oficina con código de vestimenta formal o casual de negocios quiero que me recuerden por mi profesionalismo no por ser la ¨Fashion¨ de la oficina. Lamentablemente si te ven muy Fashion comparada con el colectivo, la impresión sobre tu trabajo va a estar sesgada, puede ser que no se acuerden de tu nombre pero digan ¨la del pantalón de flores¨ o la de del ¨saco amarillo¨ o ¨la arregladita¨. Hay personas que erradamente creen que verte bien denota ¨superficialidad¨ o ¨mucho arreglo¨ para ir a la oficina y falta de interés por el trabajo ¨ ¿Cuántas horas pasará frente al espejo? ¿A qué hora se levantará para llegar ¨así¨?¨ No potenciemos esos sesgos con colores, telas, texturas y estampados inadecuados, dejémoslo para los ¨Casual Friday¨ si es que la empresa lo permite dentro de su Dress Code.
Por eso no se guíen por fotos que les jalen el ojo para imitar estilos profesionales, siempre vean lo que hay detrás. Claro, también depende del rubro del negocio, hay rubros que permiten un dress code más creativo o más natural / deportivo que otros pero siempre es bueno cuidar el mensaje subliminal de los colores, texturas y estampados o al menos dejarlos para el Casual Friday.
Recuerden no recargar los puntos de atención: llevar uñas de color, pulseras, reloj, anillos, collar, aretes largos, lentes, casaca de color; todo lo anterior junto ¡es demasiado!, no queremos que seas el ¨ekeko¨ de la oficina. El ojo lee primero de la zona del cuello a la cintura y si te pones todo encima el receptor de tu mensaje se distraerá por tu recargado outfit. Por siacaso, siempre antes de salir de tu casa, sácate algún accesorio.
Mis imágenes no serán tan atractivas pero muestran la realidad, la verdad. No tengo que engañarlos haciéndoles creer a través de una imagen vendedora es como ustedes deben vestirse, sin considerar su morfología, colorimetría, estilo, dress code laboral y todo lo mencionado anteriormente.
Adjunto imagen con algunos outfits de estilo clásico en su mayoría con pocos detalles creativos o sensuales. Debo de confesar que durante mis más de 10 años como empleada de planilla fue muy difícil vestirme con un look 100% profesional, pues mi personalidad creativa (55%) a veces vencía a mi personalidad clásica (45%); estilos que con el paso de los años y tras estudiar Asesoría de Imagen en London Image Institute he logrado revertir mediante el uso de accesorios que complementan mi estilo o algún color que quizá no sea corporativo pero que me haga sentir muy bien y le dé un toque de mi estilo a todo el outfit.
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